La Catedral de Sevilla es uno de los monumentos más visitados de España, con más de 2 millones de visitantes al año. Durante la temporada alta (marzo-junio y septiembre-octubre), las colas de entrada pueden alargarse de 60 a 90 minutos, sobre todo entre las 11:00 y las 14:00. Se entra por la Puerta del Lagarto, cerca de la Torre de la Giralda. Las colas suelen empezar a formarse antes de las horas de apertura y serpentean alrededor del Patio de los Naranjos, provocando largos retrasos a los visitantes sin reserva. Con zonas de sombra limitadas y el creciente calor del mediodía, la espera puede ser incómoda, por lo que el acceso sin colas es una opción que ahorra tiempo y evita el estrés.